
*Cuando no se dice la verdad, la mentira continua incrementando*
(Algo que nos ensucia mucho por dentro, es la falsedad. No ser honestos implica no decir la verdad. La mentira no es otra cosa que tener miedo a mostrarnos tal como somos. Lo maquillamos con medio-verdades o silencios y con mentiras premeditadas. Cuando empezamos a mentir, eso conlleva haber abierto “la caja de Pandora”, ya no se podrá detener y no sabremos que más vamos a inventar para salir al paso del conflicto que hemos desatado con nuestra mentira. Entonces, nosotros, el alma, nos cobijamos muy adentro, asustados por no saber afrontar nuestras verdades)