HUBIERON MUCHAS MÁS… hasta que ayer, se fue.

HOMENAJE PÓSTUMO A UNA ALMA QUE PASÓ POR MI VIDA HASTA AYER

Conversaciones con mi padre lokik: ¿Cómo podría alguien comerse a quien ama?

Alguien que está muy próximo a la recta final, se plantea todo lo que ha vivido con otra manera de ver las cosas que ha experimentado a lo largo de su vida. Este es el caso de mi padre de 91 años. Él, en estos momentos hace balance de su vida y en un momento muy preciso se planteó que la carne provenía de los animales y del sufrimiento de su muerte. Sabe que ha estado consumiendo esos cadáveres, que su cuerpo se nutrió de ellos y que él, el alma, sufrió por ello. En otras palabras, desde el momento que tuvo esa realización, dejó definitivamente de comer cadáveres.

Ayer, en su cama de “volar”, como siempre llama al momento de irse del cuerpo, se volvía a felicitar por su decisión tajante. En sus ojos brillaba una gran satisfacción; había asistido lamentablemente en su momento, al sacrificio de un cerdo en una empresa muy conocida, que ofrecía eso como una visita/excursión como propaganda de sus “productos naturales”. Decía: -¡si todo el mundo viese como sufren los animales, todos serian vegetarianos! En aquel momento se juró y perjuró que no lo volvería a hacer.

Pues bien, ayer como decía, volvió a salir este tema, porque está orgulloso de ello.

• Me comentó a tono de pregunta:  -¿Cómo puede la gente que come carne, sentir que no puede comerse a sus gatos o perros…, mascotas en general? Porque eso ha sido así a lo largo de tiempos inmemoriales, fíjate en los egipcios… No cuentan los chinos.-
•  Le contesté: -porque los aman. ¿Cómo podría alguien comerse a quien ama?-

Su mirada se perdió de pronto en las imágenes de los acontecimientos mundiales, en los asesinatos, en las violaciones, en las guerras, en las depuraciones étnicas… Le observaba y le veía viajar por todos esos desastres humanos. Extrapolando el amor por los animales mascotas, a los animales productos, me miró fijamente y dijo:

• -¿porqué no se les puede amar a ellos, a los conejos, a los cerdos, a las vacas…?- Lo dijo con una gran compasión que me estremeció.
• -A las mascotas se las ama, a los productos se los consume. Nos ponemos una máscara de insensibilidad para poder soportarlo. Es así como todo ocurre. Si no nos insensibilizamos podríamos sufrir.-

Hemos aprendido a no amar y así, en el desamor, se fraguan las guerras, las injusticias, las peleas callejeras, las críticas… No se ama en estos tiempos tan duros de ahora. ¿Cómo podríamos pelearnos con alguien, pegar, insultar, criticar, asesinar, violar…, si sintiéramos amor llano por él? El amor es un bálsamo para el alma, porque el alma es amor. Debido a que no nos consideramos almas, no podemos conectar con ese amor que está a raudales en nuestro interior.