BHOG (alimentos cocinados en conciencia positiva, conciencia de alma)

Como es la alimentación que tenemos. Como preparamos la comida?

No es tan solo cómo es la calidad de los alimentos que preparamos, sino que también cómo los preparamos; en qué estado los preparamos, si los cocinamos nosotros mismos o los compramos ya preparados.

Del mismo modo que el agua se afecta por las vibraciones de las palabras y de los pensamientos que se le dirigen, lo mismo sucede con la comida (experimento del Dr. Masaru Emoto -vídeo-)

Si ya habéis visto el vídeo, se podrá comprender de qué manera nos puede afectar o influir los alimentos que comemos. No importa si un alimento es de gran calidad .., si no está cocinado en un estado de pensamiento positivo, si está cocinado con prisa, si quién lo prepara (en una cocina de restaurante o fábrica de alimentos procesados) está atormentado por un mal ambiente de trabajo, rencillas, estrés, celos .., etc., ¿podéis imaginaros de qué se impregnará aquel alimento que vamos a comprar en el súper, o, que consumiremos en un restaurante?

Como humanidad estamos llegando a niveles muy delicados. Hay hambre de verdad, hay guerras, injusticias .., muchas enfermedades … Pero, aunque sólo sea un trocito de pan lo que podamos comer, antes de ponérnoslo en la boca, démosle la energía de los buenos pensamientos. Procuremos que sean alimentos que no provengan del sufrimiento animal ni de su explotación, porque en sus células se habrá impreso el sufrimiento de su último minuto de vida, y entonces, nos comeríamos el resultado de su sufrimiento. Todo ello no nos afecta sólo físicamente al cuerpo, sino, nos influye la mente y el intelecto. Necesitamos estabilidad interior; si no la tenemos .., revisemos cómo es lo que nos alimenta.

También agradezcamos a Dios o al Universo .., la más pequeña miga de pan que podamos comer y démosle energía positiva con la mirada antes de comerla.