(……Así que no. No soy extraordinaria. Soy nada más el resultado del esfuerzo individual y el colectivo. Lastimosamente ahora estoy en la etapa en que me toca sola, en que me toca tener que ser la única que escucha a mi cabeza constantemente jodiéndome, diciéndome que no sirvo para esto, que no voy a llegar lejos, que a nadie le va a gustar lo que escribo. Despertar me toca sola. Cocinar me toca sola. Cuidarme para no enfermarme. Estudiar y trabajar. Y me cuesta, y me duele. Creo que si fuera extraordinaria nada sería así de difícil ¿O sí? Pienso que no. Pero es a mí a quién le toca sentirse extraordinaria, aunque no lo sea. Porque si no, sin engañar a mi mente, sin pretender ser lo que no soy, todo sería el caos y el desorden. Y no me puedo dar ese gusto, no estando donde estoy ahora.)

Sara Rico-Godoy**

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            julianeus
1 MARZO, 2019 EN 3:33 PM

1. Si alguien te dijera que todo es una obra de teatro y que somos los actores que representamos nuestros papeles con esmero y precisión.., si alguien te dijera que eso que te ocurre ya te ocurrió en el pasado en este mismo cuerpo que estás ahora, pero 5000 años atrás.., que estamos en una rueda que gira y gira y repite y repite.., ¿qué pensarías?.., ¿que sentirías..,? A lo mejor llegarías a la misma conclusión que yo: ¡nada nuevo! si ya pasastes por ello en el ciclo anterior.., podrás pasarlo con éxito también en este en el que nos encontramos y que ya está finalizando, dispuesto a empezar de nuevo. Seguir con nuestro papel, no preocuparse, sí ocuparse pero no pre-ocuparse.

    Sara Rico-Godoy
7 MARZO, 2019 EN 9:39 PM

2. Excelente reflexión y da muchísimo qué pensar, sin duda la idea de las múltiples vidas es una total maravilla, pues trae consigo esa esperanza de que se vive más de una vez y qué debemos vivir poco a poco, sin afanarnos tanto. Un saludo y gracias por tu comentario.