-Igual que los astronautas tienen cuidado de que su traje no se rasgue o deteriore cuando están haciendo su inmersión en algún lugar lejos de su ambiente natural, así mismo hemos de cuidar nuestro “traje” (cuerpo), para seguir experimentando este mundo en el que hemos llegado.-
PUNTOS 17/8/17: *Cuando no hay un alma en un cuerpo, ese cuerpo no es consciente de nada. Un alma deja un cuerpo y forja una conexión con otro cuerpo y, de esta forma, ese cuerpo se hace viviente; de lo contrario, el cuerpo no tiene vida. Ese cuerpo no viviente también crece; primero se crea un muñeco de cinco elementos; cuando sus órganos están formados, un alma entra en él y entonces tiene vida: seres humanos vivientes. Las almas sois inmortales.*
Experimentamos cuando tenemos cuerpo. El cuerpo está provisto de órganos para poder experimentar todo el campo físico. Mientras no estamos en un cuerpo, solo tenemos consciencia de existir: el “yo soy”. Todo lo que se cuela detrás del yo soy, proviene de estar en un cuerpo. Podríamos pensar que, somos provenientes de otro mundo y que para poder estar en este otro mundo nos hace falta un traje como los astronautas, ya que nuestra naturaleza es de energía sutil y no se podría estabilizar en este ámbito de energía densa.
Sin “traje” no hay experiencia. Tengamos pues una buena práctica con él; mantengamos su duración pero que sea de calidad. Muchas veces lo maltratamos con alimentación inadecuada y otras prácticas. Este cuerpo está formado de los 5 elementos del que está compuesta la naturaleza, por lo tanto demosle elementos naturales adecuados para la supervivencia, tratemoslo con cariño, no lo explotemos tanto. Así puede que llegue a viejo sin que deje de servirnos adecuadamente y poder tener hasta el final todas las experiencias completas.